Hace unas semanas, cuando las temperaturas en St. Louis, Missouri, descendieron a un solo dígito, los rescatistas de Stray Rescue of St. Louis (SRSL) recorrieron las calles de la ciudad en busca de perros necesitados. Cuando se detuvieron frente a una casa abandonada durante su búsqueda, rápidamente se dieron cuenta de que todavía quedaba alguien abandonado.
La casa estaba vacía, pero un animal indefenso estaba acurrucado y temblando en el patio trasero.
“[Él] estaba encadenado, detrás de una casa abandonada, a una caseta para perros llena de agua congelada”, escribió SRSL en Facebook. “La crueldad de este acto por sí sola nos da escalofríos”.
El equipo de rescate, liderado por Donna Lochmann, estaba desconsolado, pero el perro, al que más tarde llamaron Eskimo Joe, se olvidó de todos sus problemas tan pronto como vio a sus rescatadores.
“Nos acercamos a él y nos saludó moviendo la cola y presionó su cuerpo contra nosotros mientras usábamos cortapernos para liberarlo”, escribió SRSL.
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Eskimo Joe supo al instante que el equipo estaba allí para salvarlo. Y, a pesar del trauma por el que había pasado, el niño irradiaba amor.
Lochmann cargó a Eskimo Joe en el asiento del pasajero de su Jeep, y él se negó a quitarle los ojos de encima todo el tiempo.
“Miró fijamente a Donna durante su viaje hacia la libertad y le encantaron los asientos con calefacción”, escribió SRSL.
Eskimo Joe pronto conoció al equipo veterinario de SRSL, que le hizo un chequeo completo al dulce niño. Resultó que tenía dirofilariosis pero, por lo demás, estaba sano. El equipo inició un plan de tratamiento para Eskimo Joe, que incluía medicamentos diarios y mimos interminables.
Al equipo le encantaba pasar tiempo con él, pero sabían que se curaría más rápido en un hogar de acogida cálido y tranquilo. No tardó mucho en encontrar el hogar perfecto.
“Como es simplemente el mejor chico, se fue a una casa de acogida casi inmediatamente”, escribió SRSL.
Eskimo Joe se instaló en su hogar temporal, donde ha estado desde entonces. Sigue buscando una familia permanente, pero por ahora está disfrutando de todo el amor que sus padres adoptivos tienen para darle. Y ahora se ve totalmente diferente de cuando lo rescataron por primera vez.
“Es el alma más dulce que he conocido”, dijo la madre adoptiva de Eskimo Joe, Tara Rueter, a SRSL en una nota que luego compartió en Facebook. “¡Este chico es tan dulce como puede serlo y se merece solo lo mejor!”
El equipo de SRSL está ansioso por ver a Eskimo Joe en su hogar definitivo, pero por ahora les reconforta saber que está cálido y seguro. Y están emocionados de verlo finalmente recibiendo todo el amor y la atención que se merece.
